No se me ocurre algo más rico que un buen perrito, tocineta, mucho queso, salsas y para mí, que no falte nunca el guacamole. La oferta callejera de perros en la ciudad es bastante amplia y recorrida, lugares que llevan más de 15 años en la misma esquina sirviendo el mismo producto. Las generaciones cambian, lo cierto es que estas delicias callejeras siempre harán parte de nuestra cultura paisa. ¿Cuál es su favorito? Mi ruta está verdaderamente imperdible.